Rumbo a lo ‘irrazonable’
Escribe Carlos Fresneda desde Londres para El Mundo.com–Fletar un barco en estos tiempos que corren, con 11 emprendedores a bordo, 20 mentores y más de 600 estudiantes, prestos a recorrer 25.000 millas náuticas, tocar puerto en 13 países y en poco más de 100 días, puede resultar a simple vista una odisea bastante ‘irrazonable’.
De eso se trata precisamente. Al fin y al cabo, la misión del ‘Unreasonable Institute’ es dejar atrás el rompeolas de lo razonable y zarpar a velocidad de crucero, rumbo a un futuro que no puede esperar.
El ‘Instituto Irrazonable’, con sede en Boulder (a los pies de las Montañas Rocosas) es hoy por hoy la ‘aceleradora’ más puntera de emprendedores tecnológicos de ‘alto impacto’. Su fundador, Daniel Epstein, se define a sí mismo como un "optimista impaciente", convencido de que el viejo paradigma está haciendo aguas y que los cambios necesarios tienen que suceder más y más rápido.
Su ley de vida se la pidió prestada a George Bernard Shaw: "El hombre razonable se adapta al mundo, mientras que el irrazonable intenta que el mundo se adapte a él. Consecuentemente, todo el progreso depende del hombre irrazonable".
A bordo del MV Explorer, el ‘capitán’ Epstein y su intrépida tripulación han completado su odisea este fin de semana en Barcelona, último puerto en el cuaderno de bitácora de ‘Unreasonable at Sea’. Partió a primeros de año de San Diego y ha dejado su estela en Shanghai, Hong Kong, Singapur, Ragoon, Ciudad del Cabo, Takoradi y Casablanca.