La decisión está tomada. El Ministerio de Hacienda presentará hoy a los sindicatos de la función pública su propuesta para congelar los salarios en 2014. Eso sí, a diferencia de lo que ocurrirá en algunas comunidades autónomas, como Cataluña y Andalucía, los funcionarios y empleados públicos de la administración central, local y del resto de autonomías mantendrán sus catorce pagas tanto este año como el próximo.

Además, al igual que en los últimos ejercicios, se vuelve a congelar la oferta de empleo público y se mantiene una tasa de reposición del 10%en servicios públicos como la educación, la sanidad o la seguridad.

Además, los Presupuestos, que el Consejo de Ministros prevé aprobar mañana, incluirán una subida de las pensiones del 0,25%, resultado de aplicar la nueva fórmula de cálculo de revalorización de las prestaciones. No obstante, la ministra de Empleo, Fátima Báñez, volvió a insistir ayer en el Congreso en que se puede actuar sobre los ingresos del sistema para conseguir elevar las prestaciones. Una de estas medidas consistirá en volver a subir la base máxima de cotización, que ya se elevó un 5% el año pasado. Este incremento se traduce en que se incrementan las cotizaciones sociales de los asalariados de sueldos más altos, tanto la parte a la que hace frente el empresario como lo que paga el trabajador.

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En todo caso, y pese a que, según los cálculos de los técnicos del Ministerio de Empleo aplicar la nueva fórmula de revaloriación ahorrará casi 810 millones de euros ya en 2014, el gasto en pensiones sigue creciendo de modo exponencial. Como avanzó ABC el pasado lunes, los Presupuestos para el próximo año incluirán un incremento del gasto en jubilaciones de más de 8.000 millones de euros. Esto se explica porque pese a que se limiten las subidas de las prestaciones y se retrase la edad de jubilación, el número de pensionistas es cada vez mayor. Además las prestaciones de los nuevos pensionistas son más elevadas y su esperanza de vida también.
Más poder adquisitivo

El Ministerio de Hacienda argumenta que pese a las críticas recibidas los pensionistas verán incrementado este año su poder adquisitivo. Esto será así porque el Ejecutivo prevé que la inflación se sitúe en noviembre en el entorno del 0,7%y cierre el año en el 0,6%. Estas cifras son, en ambos casos inferiores a la subida de las pensiones que se aplicó el pasado mes de enero y que fue del 1% con carácter general y del 2%en el caso de las prestaciones más bajas.

Del mismo modo, esta moderada inflación mitigará el impacto de la congelación del sueldo de los funcionarios.

El Ejecutivo prevé, además, que siga disminuyendo el número de empleados públicos. Según las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE), estos siguieron creciendo sin parar durante la crisis y sólo comenzó a disminuir el número de asalariados a finales de 2011. De hecho desde el comienzo de 2008 y el tercer trimestre de 2011 el número de empleados públicos creció en más de 350.000. En ese mismo periodo se destruían en el sector privado más de tres millones de puestos de trabajo.

Las estadísticas oficiales muestran que desde ese punto álgido de finales de 2011 todas las administraciones públicas han empezado a adegalzar sus plantillas. En menos de dos años se han reducido en más de 380.000 empleados, volviendo a las cifras del comienzo de la crisis.

Estos Presupuestos se enmarcarán en un escenario de ligera recuperación de la economía. Tal y como avanzó el martes el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el Ejecutivo revisará al alza sus previsiones de crecimiento, de modo que en lugar del 0,5% fijado en abril, ahora se establecerá el 0,7%, Una cifra que, en todo caso, se coloca en el rango inferior de la horquilla de previsiones de analistas nacionales e internacionales, que sitúan el alza de la economía española para el próximo año en el entorno del 1%.

También se mejorará la previsión de paro, que se colocará por debajo del 27%, y la de creación de empleo. A diferencia de lo previsto en el mes de abril, el Gobierno cree que ya en 2014 se comenzarán a crear puestos de trabajo.

Junto con los presupuestos, el Gobierno aprobará el viernes la nueva ley de desindexación de la economía, que desliga los precios públicos y las tasas de la evolución del IPC.