La eólica española Gamesa ha inaugurado oficialmente este lunes en Agüimes (Gran Canaria) el primer aerogenerador marino de España. El molino offshore, que desarrolla una potencia de cinco megavatios y ha sido fabricado totalmente en España, servirá como prototipo para la producción y comercialización de estos elementos, principalmente en los mercados alemán y británico.

Si el futuro de los aerogeneradores en general en España es incierto, en el caso de los marinos es aún más complicado. La gran profundidad de la plataforma continental y las condiciones de viento hacen que estos molinos —cuya producción, por el momento, y su instalación y mantenimiento son más caros— no resulten rentables frente a los terrestres.

El presidente de Gamesa, Ignacio Martín, ha defendido este tipo de proyectos experimentales y ha solicitado al Gobierno y a las demás instituciones que la suspensión de las subvenciones a las renovables —que ha dicho entender en el actual contexto económico— no implique abandonar el apoyo a la innovación…

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"No matemos a la industria", ha reclamado Martín en presencia del ministro del ramo, José Manuel Soria. Pese a defender el rendimiento de la energía eólica frente a otro tipo de renovables, el dirigente de la empresa energética ha admitido que "el 100%" de sus previsiones de negocio en instalaciones eólicas está en el exterior. Sin embargo, ha resaltado, la compañía realiza todo el trabajo de ingeniería en España. Y por eso ha pedido "el compromiso" de las instituciones para facilitar el desarrollo de proyectos de I+D.

Soria ha reiterado que el déficit de tarifa obliga a reducir los costes en el sistema energético, certificando que no se plantea dar un volantazo en el tratamiento a las renovables. Aunque después ha dejado una puerta abierta a otorgar una regulación especial a los proyectos experimentales al señalar que la política del Ejecutivo central es "primar siempre" la innovación.

El ministro también ha aprovechado para defender el régimen especial de retribución de las renovables en territorios extrapeninsulares, entre ellos Canarias. El también presidente del Partido Popular canario ha dicho que "no es un privilegio, sino dar una solución singular a un caso singular". La extinta Comisión Nacional de la Energía había criticado el modelo al señalar que las instalaciones de renovables son tan positivas en la península como fuera de ella.