Autónomos: sin ingresos, seguirán pagando sus impuestos
Son el motor del país, el pulmón del empleo, pero se han quedado sin gasolina, obligados a echar la persiana para luchar contra la pandemia. Sus cuentas corrientes tiritan, no entra dinero en la caja, pero el contador de facturas no se para. Esta semana deberán pagar los casi 300 euros de cuota a la Seguridad Social y en unos días arranca un mes en el que hay que cumplir las obligaciones con Hacienda, que no perdona. Muchos ya anticipan que de esta ya no salen. La ruina.
Son taxistas, propietarios de un bar, de una pequeña peluquería, de una tienda de ropa, todos levantan el país cada día de la semana y se sienten defraudados por el poco respaldo del Gobierno en una crisis sanitaria que terminará mutando con este virus en una crisis económica que ya se antoja profunda, sin precedentes, más después de la prohibición de despedir y del parón económico decretado por Sánchez que prohibirá el trabajo en actividades no esenciales e impone permisos retribuidos a las empresas desde hoy y hasta el 9 de abril.
«La recuperación va a ser difícil y muchas empresas y autónomos van a quedar en el camino. O cambian el rumbo o vamos a la deriva», dice Lorenzo Amor, presidente de ATA y vicepresidente de la CEOE. «Primero nos prohíben despedir y vierten dudas sobre los que crean empleo y ahora a muchos autónomos se les prohíbe trabajar y no tendrán permiso retribuido ni ayudas», añade.