El «intrusismo» de Correos pone en pie de guerra a las agencias de viajes
La reconversión de Correos, que ha cambiado las cartas y las postales por los billetes de tren y las cajas de viajes sorpresa, levanta ampollas en el sector turístico. Varias asociaciones de agencias de viajes preparan una batalla legal contra la empresa pública, a la que acusan de «intrusismo» y de «saltarse los requisitos para ofrecer viajes combinados».
Correos inició su andadura en el sector turístico de la mano de Renfe. Bajo la supervisión del Gobierno, la empresa postal firmó un acuerdo con el operador ferroviario en octubre del año pasado para vender billetes de AVE, larga y media distancia. Una iniciativa con la que el Ejecutivo pretende sacar provecho a la «capilaridad» de Correos, que cuenta con una red de 2.400 oficinas en toda España, muchas de ellas establecidas en localidades con escasa población.
La medida fue rechazada desde un primer momento entre las agencias de viajes, que consideraron que Correos estaba incurriendo en una «competencia desleal» con el soporte del Ejecutivo. «Como en cualquier otro sector, las 8.000 agencias de viaje que están establecidas en España cumplen una serie de requisitos muy estrictos. No creo que Correos también lo haga», explica el presidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), Carlos Garrido. Tanto esta organización como la patronal catalana del sector, Acave, han reclamado ya a la dirección general de turismo de la Comunidad de Madrid que vigile si Correos cumple los requisitos para vender billetes de tren.